La sangre, la lengua y el apellido

Nuestras lenguas no se mueren, las matan, sentencia Yásnaya Aguilar Gil, lingüista, escritora y traductora en La sangre, la lengua y el apellido. Yásnaya pertenece al pueblo mixe, nació y se crio en Oaxaca (México) y desde el corazón de ese territorio interpela la razón del saber capitalista, colonialista y patriarcal.

Las lenguas que hablan las poblaciones necesitan de un suelo donde crecer y vivir, sin tierra no hay tal vida. Como pueblo que reside en un territorio de conquista y como habitantes que resisten al despojo, el discurso de Yásnaya entronca con la tradición anarquista porque interpela la responsabilidad del Estado en el saqueo.

Aquí veremos como la imposición de una cultura pretendida universal borra a los pueblos que son colonizados por el Estado, y que esa supresión se manifiesta en empresas de pillaje en la geografía y de asesinato de sus pobladorxs.

No es casual que sean los pueblos indígenas quienes desafíen a los proyectos neo-extractivistas, porque han sido guardianes. Y ahora que el capitalismo necesita de más territorios, su defensa se vuelve también resguardo del medioambiente y por tanto de la vida.

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Detalles

Año

2021

ISBN

978-987-3861-54-3

Tamaño

20×13

Páginas

128

Acerca del Autor

Yásnaya Aguilar

Escritora, lingüista, traductora, investigadora y activista originaria de Ayutla Mixe, Oaxaca. Estudió la licenciatura en Lengua y Literatura Hispánica, así como la Maestría en Lingüística en la Universidad Nacional Autónoma de México. Su trabajo se encuentra fuertemente enfocado a proyectos sobre divulgación y estudio de diversidad lingüística y lenguas originarias en riesgo de desaparición en México, y participa de proyectos en el desarrollo de contenidos gramaticales para materiales educativos en lenguas indígenas. Es parte del colectivo COLMIX, una agrupación que realiza actividades de investigación y difusión de la cultura mixe, colabora con la biblioteca de investigación Juan Córdoba en Oaxaca, escribe el blog #Ayuujk, en Washington post, El país, ha sido traducida al francés e inglés.